Si planeas crear un curso online, tendrás que responder esta pregunta en algún momento: ¿Debo grabar cursos en video?
Para muchos creadores de cursos, la idea de grabarse en video es desalentadora. Pero es probable que necesiten cursos en formato video para posteriormente crear una academia online.
Es posible que quieras grabar cursos online en video. Piénsalo: ¿Prefieres inscribirte en un curso online y tener que leer 100 diapositivas, o ver al profesor guiarlo a través de una presentación en video atractiva?
No es necesario que realices cursos en video, pero hacerlo te aportará lo siguiente:
- Hace que sea más fácil para tu audiencia confiar y aprender de ti.
- Mejora la calidad de tu curso
- Aumenta el valor percibido de tu curso
- Permite poner un precio más alto en su curso
Antes de grabar tu primer curso, observa a algunos de los formadores en video con más éxito, para tratar de descubrir qué hacen diferente a los que no tienen tanto éxito.
Descubrirás que todos siguen cinco reglas, a pesar de que cada uno tiene estilos muy diferentes.
Estas cinco reglas son “la ciencia de la presentación potente”. Estas reglas se aplican tanto si eres un principiante que se está poniendo delante de la cámara por primera vez, o un presentador experimentado que ha hablado muchas veces antes.
Debes hacer todo lo posible para seguir estos pasos, porque cuando inviertes tiempo, energía y dinero para grabar un curso, lo último que quieres es desperdiciarlo con una presentación que no está a la altura.
Estos son los 5 pasos para grabar cursos online de calidad. Te garantizo que van a ayudarte a expresarte mejor ante la cámara.
Cómo estructurar un curso online
Escoge una temática
El primer paso es pensar qué quieres enseñar. Te mostramos algunos pasos que te pueden ayudar a tomar esa decisión:
Experiencia y conocimiento basados en la práctica: busca un campo en el que seas experto, tengas experiencia y te diferencies respecto al resto de profesionales de ese mismo sector. Conoce todo el proceso de aprendizaje de la temática que vayas a escoger, ya que serás tú el que guíes a tus alumnos y alumnas por el mismo proceso de aprendizaje.
Conoce a tu competencia: sírvete de Google para buscar cursos relacionados con la temática que vas a trabajar. Estudia su contenido, aprende de sus puntos fuertes para adaptarlos a tu curso y encuentra oportunidades de mejora en los que tú puedas destacar.
Pasión e interés personal: escoge una temática que te apasione. Si te gusta lo que vas a enseñar eso se transmite en tus clases y tus alumnos y almunas lo agradecerán. Además, seguir aprendiendo de ese tema y aportando contenido a tu curso.
Demanda del mercado: Descubre las temáticas más buscadas, para crear un nicho con un volumen amplio de alumnos. Puedes servirte de herramientas SEO como Ubersuggest, para ver los volúmenes de búsqueda según palabras clave.
Recuerda, a medida que desarrolles tu curso, mantén una organización meticulosa, archivando tus documentos y recursos en una carpeta dedicada para asegurarte de tener todo a mano y facilitar el proceso de creación y enseñanza.
Define tu público objetivo
Definir tu público objetivo es esencial para asegurarte de que tu curso online llegue a las personas adecuadas y cumpla con sus necesidades. Te presentamos los pasos a seguir
Investigación de mercado: Realiza una investigación exhaustiva del mercado para comprender quiénes son tus posibles estudiantes. Examina a tu competencia, analiza los cursos existentes en tu temática y busca información demográfica y psicográfica relacionada con tu nicho.
Identifica características demográficas: Define las características demográficas de tu público objetivo, como edad, género, ubicación geográfica, nivel educativo, ocupación y estado civil. Estos datos te ayudarán a tener una idea más clara del perfil de tu estudiante ideal.
Analiza los intereses y las necesidades: Examina los intereses, las pasiones y las necesidades de tu público objetivo en relación con la temática de tu curso. Identifica qué desafíos enfrentan y cómo tu curso puede brindarles soluciones y beneficios tangibles.
Crea personas o perfiles de cliente: Basándote en la información recopilada, crea perfiles de cliente ficticios que representen a tus estudiantes ideales. Incluye detalles como nombre, edad, ocupación, intereses, objetivos y desafíos. Esto te ayudará a visualizar mejor a quién te diriges y cómo adaptar tu contenido a sus necesidades.
Utiliza encuestas y entrevistas: Si ya tienes una audiencia o una base de suscriptores, aprovecha estas oportunidades para realizar encuestas o entrevistas que te brinden información directa sobre las expectativas y preferencias de tu público objetivo. Esto te permitirá ajustar y personalizar tu curso según sus comentarios.
Analiza las estadísticas y los datos: Utiliza herramientas analíticas para obtener información sobre el tráfico de tu sitio web, las interacciones en redes sociales y otras métricas relevantes. Esto te ayudará a comprender mejor quién está interesado en tu contenido y qué tipo de personas están interactuando con él.
Refina y ajusta tu público objetivo: A medida que obtengas más información y feedback, ajusta y refina tu público objetivo. Mantén una mentalidad abierta para adaptarte a las necesidades cambiantes y descubrir oportunidades adicionales.
Crea un estilo y un tono consistente
No quieres parecer aburrido y de piedra, pero al mismo tiempo no quieres ser exagerado y forzado. Tampoco quieres ser demasiado formal y serio, pero no quieres ser un payaso bromeando cada minuto.
Entonces, ¿Qué haces?
Bueno, antes de dar un paso para grabar tu curso, piensa en los aspectos de tu personalidad que deseas enfatizar.
Los mejores presentadores eligen concentrarse en ciertas características según su contenido, marca y audiencia a la que enseñan.
Hazte las siguientes preguntas:
- ¿Quién es mi audiencia?
- ¿Qué aspectos de mi propia personalidad puedo resaltar para que coincidan con la marca que estoy construyendo y servir mejor a mi audiencia?
Cuando hayas resuelto esto, es hora de ponerte delante de la cámara. Graba tu primer video unas cuantas veces. Vete mirándolo y ajustándolo.
Una vez que tengas un equilibrio con el que estés satisfecho, intenta mantenerlo, así crearás un estilo y un tono uniforme para grabar cursos online.
Consejo premium:
Si todavía tiene problemas para obtener el tono correcto, pregúntese esto:
- Si mi marca fuera una persona, ¿qué 3 palabras usaría para describirla?
- Divertido, peculiar y alegre.
- Potente, pensativo y profundo.
- Fresco, tranquilo y seguro.
Estructura y escribe el guion
Me encantan los videos espontáneos, sin guiones. Hay algo extremadamente poderoso cuando se habla directamente desde el corazón. Pero cuando quieres grabar cursos online, es casi imposible hacerlo todo sin ninguna preparación previa.
Recuerda, tus estudiantes esperan una experiencia educativa organizada y de calidad. Por eso debes darles la información de una manera estructurada.
Es por ello tan importante dedicar algo de tiempo a escribir lo que vas a decir, porque puedes olvidarte de recordar todo el material y concentrarte en hacer que tus palabras cobren vida.
Cuando no sigues un guion, puedes terminar malgastando tu tiempo en una sola toma. Los mejores formadores online se muestran confiados y tranquilos. Eso es porque escriben sus palabras antes de grabar cursos.
El simple hecho de crear un guion también estructura el material en tu mente, por lo que el impacto que esto tendrá en el desarrollo de tu curso será enorme.
Si estás utilizando un teleprompter, asegúrate de practicar antes de grabar cursos. ¡No hay nada peor que ver los ojos de un profesor moverse de un lado a otro! Esto denota poca profesionalidad.
Consejo premium:
Mientras escribes el guion de tu curso, asegúrate de leerlo en voz alta. Te darás cuenta de que escribes muchas cosas que no dirías, y esas son las cosas que sonarán raras en el video. Intenta eliminarlas o decirlas de la una forma más natural.
Imagínate que estas hablando con un amigo
Presentarlo en la cámara es casi mágico, porque estás presentando a un público de cientos o potencialmente miles de personas a través del lente.
Pensar que miles de personas te verán a través de la cámara no te ayudará, porque es casi imposible enfocarte en una gran audiencia cuando presentas.
De hecho, pensar en todos los espectadores que te observan, no hará más que ponerte nervioso.
Entonces, ¿Qué haces?
Para replicar esto ante la cámara, imagínate a alguien que conozcas. Puede ser tu hermano, tu mejor amigo o tu novia, quien sea que necesites para ponerte en el estado adecuado.
Una buena opción es tener un buen amigo sentado y operando con la cámara. Así simplemente le hablas directamente a él.
Consejo premium:
Si no tienes o no quieres a nadie contigo a la hora de grabar cursos, imprime la foto de alguien que te inspire tranquilidad y pégala encima de la cámara.
Duplica tus niveles de energía: la expresión se pierde en la cámara
Newton dijo que la energía ni se crea ni se destruye, solo se transforma de una forma a otra. Y si bien eso puede ser cierto para las leyes de la física, está claro que Newton nunca pasó tiempo frente a una cámara.
Cualquier nivel de energía que emitas se reduce a la mitad. Esto lo comprobarás cuando te vuelvas a mirar en video. Es por eso que debes mantener el nivel de energía al máximo mientras tu intención sea grabar cursos online.
Puede que te sientas incómodo al hacer esto por primera vez. Sin embargo, si lo haces, supondrá una gran diferencia para la calidad final de su presentación si lo hace.
Recuerda, esta regla no solo se aplica a tu tono de voz, sino que también cuenta para tus expresiones corporales, la cuales analizo con más detalle en el último punto.
Consejo premium:
Grabar cursos online con una sonrisa tanto como te sea posible. Aumentará tu entusiasmo y hará que tengas esa luz en tus ojos que mantendrá a tus alumnos enganchados.
Optimiza tu lenguaje corporal
Resulta que el simple acto permanecer erguido con las manos extendidas puede mejorar enormemente nuestra sensación de confianza en nosotros mismo.
Mira la investigación de la psicóloga de Harvard Amy Cuddy sobre el poder del lenguaje corporal. Está en Inglés, pero subtitulado al español, de verdad que no tiene pérdida
Entonces, si eres alguien que se siente nervioso ante la cámara, prueba esto antes de grabar cursos. Cuando estés grabando, ya sea de pie o sentado, asegúrate de que tus pies estén firmemente plantados en el suelo y tu columna vertebral lo más recta posible. Evita inclinarte y mirar hacia abajo.
Si observas alguno de los formadores u oradores más famosos, también notarás que son bastante expresivos con el uso de gestos. De acuerdo con estudios de la Universidad de Chicago, los gestos ayudan enormemente a ilustrar las ideas de una manera que las hace comprender mejor.
Esto no es realmente sorprendente si lo piensas, porque el uso de gestos ayuda a convertir las ideas abstractas y las hace más concretas y tangibles.
Pero como con todo, aquí se necesita un equilibrio: si mueves las manos todo el tiempo, se volverá molesto para el espectador y le distraerá de tu mensaje. Es como leer un libro y resaltar cada línea de cada página, nada destacará si lo haces todo el tiempo.
Consejo premium:
Mantén las manos a la altura del ombligo para que se vean por encima de la cintura pero debajo de los hombros, lo suficientemente visibles como para dejar una impresión sin estorbar.
